Con la creatividad de siempre, Pixar le dice basta al bullying.

Escrito y dirigido por el guionista y director Dave Mullins, el cortometraje animado del estudio norteamericano, titulado Lou, aborda esta problemática social que sufren miles de niños y adolescentes en el mundo sin que muchas veces se haga nada por controlarlo.

La historia es adorable. Lou es un monstruo hecho de los «objetos perdidos», que vive en una caja en un patio del colegio, un lugar supuestamente seguro para los niños pero que en la práctica no lo es debido al bullying.

Esta original criatura con un cuerpo formado por un buzo rojo y ojos de pelotas de béisbol, es testigo de los abusos que comete un niño con sus compañeros.

Entonces decide idear un plan para enseñarle una valiosa lección.

El corto busca la reflexión por parte del espectador sobre cuáles son las vivencias que llevan a un niño a acosar de otros.

Ahí radica su originalidad: aborda el bullying desde una perspectiva que pocas veces se muestra, la del acosador, y enseña que el acoso es un tipo de violencia aprendida.

El original corto aborda el bullying desde la perspectiva del acosador

En una entrevista el director Dave Mullin, que trabajó en Pixar como supervisor de animación de películas como Los Increíbles, Buscando a Nemo y Monsters Inc., confesó: «En la historia Lou obliga al bully a pasar por un desgaste para convertirse básicamente en una mejor persona.  Y al hacerlo, obtiene lo que realmente quiere. Él solo quería atención «.

El proyecto, estuvo entre los nominados al Mejor Cortometraje de Animación en los Oscar 2018, aunque el premio finalmente fue para «Dear Basketball», el corto de Kobe Bryant.

Sin embargo, el mensaje de Pixar es una prueba de la preocupación que el acoso despierta en la sociedad y al hablar sobre ello colabora con la prevención de situaciones preocupantes que ya están instaladas.

Si todavía no lo viste, mirálo acá: 

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