OSi hay algo que impuso Marie Kondo, la célebre organizadora japonesa, es la idea de ordenar para optimizar el espacio y  poder soltar aquello que ya no usamos. Esta tendencia de desprenderse nos invita a preguntarnos: ¿Qué cosas necesitamos realmente? ¿Qué objetos nos hacen felices?

“Está bueno hacer el ejercicio de dejar ir: quizás alguna cosa hoy no es importante para vos pero para otra persona sí lo es. Ordenar tus pertenencias te permite eso”, aseguran Manolo Chada y Luciana Coviello, fundadores de Todo en Orden, un emprendimiento que busca reformular la manera que aprovechamos el espacio.

A través de una aplicación que ofrece un servicio de mudanza y depósitos en Buenos Aires, Todo en Orden se encargan del proceso completo: embalar, cargar, retirar y guardar todas tus cosas en sus depósitos. 

Además de ser más económicos que una baulera tradicional, su valor agregado es el orden, afirman. “El servicio es simple y transparente. En pocos clicks el cliente elige un plan acorde al espacio exacto que ocuparán sus cosas y coordina una mudanza. Nosotros embalamos, retiramos y guardamos todo sin que el cliente se mueva de su casa. Pero lo que las bauleras tradicionales hoy no resuelven es el orden. Por eso subimos las fotos de todas las cosas a un catálogo online en donde el usuario puede ver sus pertenencias y pedirlas de regreso cuando quiera a través de la aplicación”, explica Manolo, publicista y experto en marketing digital. 

Luciana y Manolo, los fundadores de Todo en Orden | FOTO: TEO

El emprendimiento responde a un síntoma de época: las grandes ciudades no paran de crecer demográficamente y el espacio empieza a escasear. De hecho, según la ONU, para 2050 dos de cada tres personas vivirán en mega urbes.

A respecto, distintas industrias ya reaccionan a este fenómeno con soluciones basadas en lo que se conoce como sharing economy, o economía colaborativa: desde los espacios co-working hasta los autos, las bicicletas y las casas, todo se comparte y se aprovecha al máximo.

«Otro dato a tener en cuenta es que los nuevos edificios cada vez son más inteligentes y tienden a no incluir bauleras propias», agrega Manolo.

Mejores decisiones

Todo en Orden comenzó a gestarse cuando un amigo en común de los emprendedores se fue a vivir a al exterior. Al volver al país tras cuatro años, todo lo que había traído se quedó varado en la aduana. «Alquiló un departamento y salió a comprar todo de nuevo porque tenía toda su vida en un container«, recuerda.

Al poco tiempo, su compañero recuperó sus pertenencias y había cosas que tenía duplicadas. En ese momento, Manolo hizo un click. «Me di cuenta que saber qué cosas tenés hace que tomes mejores desiciones y no compres lo que no necesitás», asegura.

Poco después, en febrero de 2019, tuvieron a su primer cliente: Carlota, que vive en Madrid y, como viene una vez por año de visita a Argentina, necesitaba tener sus cosas guardadas. Gracias a Todo en Orden, la última vez que viajó a Argentina pudo encontrar unas acuarelas que su mamá usaba hace 20 años.

«Las necesidades de nuestros clientes son muy diversas. Por ejemplo, a una empresa que se achicó y  se fue a un co-working les guardamos los muebles y archivos», cuenta Luciana. «También tenemos el caso de un matrimonio que se va a mudar y necesita guardar por un tiempo sus cosas hasta que le salga el crédito.»

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Me vine de Buenos Aires con las acuarelas con las que pintaba mamá hace 20 años. Usé los colores que estaban más gastados, asumiendo que eran sus favoritos ?❤️

Una publicación compartida por Carlota Maschwitz (@carlota_maschwitz) el 15 de May de 2019 a las 5:23 PDT

Con planes que van desde $2900 y aplicando los conceptos de la economía circular, Todo en Orden busca que te desprendas de eso que ya no usas, no solo guardándolo para más adelante, sino también vendiéndolo o donándolo. “Creemos que todas las cosas tienen valor y se pueden reutilizar”, destaca Chada.

Pero, ¿qué es la economía circular? Es un cambio cultural que implica no pensar los productos para usar y tirar, sino tenerlos en cuenta desde su concepción para nuevas aplicaciones. «Nos guiamos por los ejes de la organización y de la sustentabilidad», asegura Manolo. 

De esta forma, el start up ayuda a sus usuarios a vivir más despojada y, sobre todo, contribuir con el cuidado del medio ambiente. “Podemos lograrlo consumiendo menos y ayudando a que las cosas que no desean algunos puedan ser reutilizadas por otros”, concluyen los emprendedores.

^^^

¿Todavía no recibís el newsletter de ACONCAGUA? Suscribíte acá y leé noticias positivas cada fin de semana en tu mail.