Una semana después de las inundaciones en México, el número de muertos asciende a 72 y decenas siguen desaparecidas

Una semana después de que las inundaciones devastaran grandes extensiones de cinco estados del centro y este de México, el gobierno federal reconoció que el número de muertos llegó a 72, mientras que otros 48 han sido declarados oficialmente desaparecidos.

Los deslizamientos de tierra y los puentes dañados han dejado aisladas a varias regiones, particularmente en el estado de Hidalgo, al noreste de la Ciudad de México, y en el estado de Veracruz, en la costa del Golfo. El ministro de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jesús Esteva, dijo que 127 localidades seguían prácticamente inaccesibles hasta el jueves por la noche.

Esteva dijo que su ministerio está documentando y cartografiando los daños para facilitar las operaciones de rescate y recuperación, mientras que más de 8.000 soldados trabajan en las zonas afectadas para buscar a los desaparecidos y retirar los escombros.

La Secretaría de Defensa ha estado operando las 24 horas del día, asignando 21 helicópteros con entregas y suministros médicos, especialmente a regiones aisladas de Hidalgo y Veracruz.

Esteva dijo que el gobierno está trabajando con cierta urgencia como el pronóstico del tiempo del fin de semana indica que se acercará un frente frío, trayendo consigo fuertes lluvias, aunque se proyecta que las tormentas estarán al sur de las áreas afectadas por las inundaciones de la semana pasada.

Veracruz, el estado más afectado por las inundaciones, ha reportado 32 muertos y 14 residentes contabilizados como desaparecidos, seguido de Hidalgo (21 muertos) y Puebla (18).

La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, enfrenta crecientes críticas por su manejo del desastre. El jueves insistió en que la agencia estatal de Protección Civil sí emitió una alarma temprana y miles fueron evacuados, “aunque algunos residentes prefirieron permanecer en sus casas”.

Algunos residentes insisto que no sonó tal alarma.

Mientras que el viernes Nahle dijo que su administración funcionaría para garantizar que todas las familias afectadas por el desastre estén seguras y protegidas, un columnista señaló que el gobernador canceló la póliza de seguro estatal contra desastres naturales.

Cerca de Poza Rica, Veracruz, donde miles de personas se encuentran sin refugio y El agua fétida llega hasta los tobillos.los residentes de la zona son expresar preocupación por la posible propagación de la fiebre tifoidea y el cólera.

En Puebla, funcionarios del gobierno están trabajando para encontrar alojamiento para más de 200 personas que lo perdieron todo en la inundación. Aunque casi 2.000 personas han abandonado los refugios estatales con la esperanza de salvar sus hogares y propiedades, decenas de familias enfrentan un futuro incierto.

El periódico Milenio informó que el Estado se está preparando para cerrar los albergues, pero más de 200 personas que lo perdieron todo, principalmente campesinos, dicen que no tienen adónde ir.

«Somos simples agricultores. No tenemos salario, no tenemos otros medios de sustento excepto la ayuda que el gobierno pueda brindar», dijo Jesús Hernández, un residente de la Colonia Los Manguitos que se encontraba en un albergue en el municipio de Xicotepec con su esposa y varios nietos.

Al norte de las áreas impactadas en el estado de Tamaulipas, los residentes de Tampico y Ciudad Madero a lo largo de la Costa del Golfo están tomando precauciones ya que el río Pánuco ha alcanzado niveles críticos.

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha tratado de calmar las preocupaciones, reportando el jueves por la noche esa etapa de inundación no se alcanzaría hasta dentro de 80 horas, y sólo si las condiciones empeoran. Por ahora, afirmó la Conagua, el pronóstico no es motivo de alarma.

Aun así, la estatal Secretaría de Recursos Hídricos ha ordenado a agentes de Protección Civil tomar medidas preventivas en zonas bajas de los municipios aledaños.