El glaciar Marmolada pierde otros 7 metros: «Para 2050 será solo un recuerdo»

El glaciar del MarmoladaLa reina del sitio del Patrimonio Mundial de Dolomitas y la UNESCO, continúa siendo consumida año tras año. Esto fue una vez más confirmado por los hallazgos realizados por la Universidad de Padua, que durante más de treinta años ha monitoreado la situación con campañas de medición directa en el campo.

Según el grupo coordinado por el profesor Mauro Varotto y por el investigador Giovanni Benetton, durante el verano de 2025 El frente del glaciar ha perdido otros 7 metrosun retiro incluso más alto que el registrado el año pasado (6 metros). En general, en solo veinte años, el retiro ha alcanzado la impresionante cifra de 250 metros, un signo de una tendencia irreversible.

El glaciar Marmolada ya ha perdido más de la mitad de su superficie en comparación con el comienzo del siglo XX: desde las aproximadamente 450 hectáreas de hace un siglo hasta menos de 100 hectáreas actuales. Una mitad de la mitad que procede a un ritmo cada vez más acelerado.

Las causas son conocidas y documentadas:

Si la tendencia no cambia, el glaciar está destinado a desaparecer para 2050: advierten a los académicos de la Universidad de Padua. Un destino compartido por muchos otros glaciares alpinos, pero que parece particularmente dramático en Marmolada, dada su importancia simbólica.

Los pronósticos de otros estudios

La imagen dibujada por los geógrafos de Paduan se confirma en muchos otros informes. La campaña de caravana de los glaciares legambientes, por ejemplo, definió el glaciar de Marmolada A en «coma irreversible», incluso estimando una desaparición ya para 2040, con una pérdida promedio de 7-10 centímetros de espesor por día en los veranos más calientes.

Una cifra consistente con lo que se ha detectado en las últimas décadas: desde 1888, el frente se ha retirado en más de 1,200 metros, con una progresión que en los últimos años ha alcanzado picos de 90 metros por año.

La tragedia de 2022: una campana de alarma

El colapso del seracco del 3 de julio de 2022, que causó la muerte de 11 excursionistas, fue una señal inequívoca de la fragilidad de Marmolada. Una investigación científica siempre coordinada por la Universidad de Padua ha aclarado cómo el desastre fue causado por una combinación letal de factores:

Un evento extremo, por supuesto, pero destinado a no permanecer aislado en un contexto de calentamiento global.

Marmolada no es solo un glaciar: es un archivo climático que alberga siglos de historia atmosférica y ambiental en su estructura. Su desaparición significará perder un laboratorio natural irremplazable, así como afectar ecosistemas, paisajes y la misma atracción turística de las dolomitas.

Como señalan los estudiosos, detener este proceso ahora parece imposible. Pero la reducción de las emisiones climáticas, contiene el aumento de las temperaturas mundiales y proteger los recursos del agua de montaña sigue siendo fundamental para evitar que Marmolada sea la primera de una larga lista de pérdidas irreparables.

Fuentes: Universidad de Padua / Legambiente / TGR Trentino Alto Adige