El Las manzanas se encuentran entre las frutas más contaminadas por pesticidas y desde hace años, diversas investigaciones independientes e informes oficiales han reportado altos niveles de residuos, especialmente en las regiones con mayor intensidad de producción. Entre ellos destaca el Alto Adigio, corazón del cultivo de manzanas italiano y uno de los principales centros europeos por cantidad y calidad de la cosecha.
Detrás de las cuidadas extensiones de manzanos del Alto Adigio se esconde una disputa cada vez más acalorada entre quienes señalan con el dedo el uso excesivo de sustancias químicas y quienes, en cambio, defienden sus prácticas agrícolas.
La acusación de los ecologistas: «Hasta 25 tratamientos por cada cosecha»
Según la red de voluntariado Alto a los Pesticidas Alto Adige/Südtirol, Para obtener una cosecha de manzanas sana y uniforme sería necesario hasta 20-25 tratamientos con pesticidas y otros químicos sintéticos cada temporada.
Los ambientalistas señalan que esta práctica no está exenta de consecuencias: los pesticidas contaminan el agua, el suelo y el aire, con efectos directos sobre la salud humana y la biodiversidad. En apoyo de su denuncia, citan datos del Istat que hablan de 4,6 millones de kilogramos de pesticidas vendidos cada año en la región y el estudio «Agricultura Alto Adige 2020» de Eurac Research, que estima el uso de entre 80 y 120 kg de productos fitosanitarios por hectárea.
Según el grupo, las sustancias más consumidas incluyen Captan, Ditianon, Fluazinam y el más conocido Glifosato, todos considerados peligrosos para el medio ambiente y la salud. Algunos de ellos, afirman, “Se pueden utilizar hasta diez veces en el transcurso de un año.”, y las propias fichas técnicas del producto informan de riesgos de toxicidad, daños oculares, efectos cancerígenos o daños al feto.
La petición que pide la prohibición del uso de los pesticidas más peligrosos
Para exigir cambios concretos, el grupo Stop Pesticides Alto Adige/Südtirol ha lanzado una petición en línea en Change.orgque ya ha recogido casi 2.000 firmas. El objetivo es claro: obtener la prohibición de los cuatro ingredientes activos más peligrosos utilizados en los manzanos del Tirol del Sur y promover una transición hacia métodos de cultivo más respetuosos con el medio ambiente.
En concreto, la petición habla de estos principios activos:
El llamamiento se dirige a los consorcios de productores, entre ellos Assomela, Melinda, La Trentina, VOG y VIP, así como a los consejeros de agricultura y salud de las provincias autónomas de Trento y Bolzano. Según los promotores, eliminar estas sustancias significaría proteger la salud pública y la de los ecosistemas, reduciendo la contaminación hoy extendida incluso en las zonas montañosas y en los cursos de agua.
La respuesta de los productores
Por parte de los productores llega una respuesta igualmente firme. El Alto Adige Apple Consortium, dirigido por Georg Kössler, rechaza las acusaciones, calificándolas de infundadas y de datos obsoletos:
La fruticultura del Tirol del Sur – afirman – se basa en una protección vegetal responsable, científicamente fundamentada y constantemente controlada.
Todas las manzanas de la región, señalan, se cultivan según los principios de Producción Integrada (Agrios) o agricultura ecológica, que imponen normas más estrictas que la normativa europea.
Nuestro principio sigue siendo lo más claro posible, sólo cuando sea necesario – añade el Consorcio -. Con responsabilidad hacia las personas, la naturaleza y el futuro del territorio.
Según los productores, los análisis oficiales muestran que los residuos presentes en las manzanas del Tirol del Sur están muy por debajo de los límites legales, en promedio menos de un tercio del valor máximo permitido. Los pesticidas, explican, tienen un papel importante en la protección de la salud de las plantas y la calidad de la fruta, evitando pérdidas de cultivos y desperdicio de alimentos.