Muchas lo utilizan a diario sin saberlo, de hecho se encuentra en cremas solares, bases de maquillaje e incluso en algunos perfumes. Hablemos de laoctocrilenouna sustancia que sirve para proteger la piel de los rayos UV pero también para mantener estables las fórmulas cosméticas. Sin embargo, detrás de estos puntos positivos se esconde un grave problema: el octocrileno. contamina mares, lagos y ríos y también tiene efectos controvertidos sobre la salud humana.
Cada año en Europa se utilizan miles de toneladas de octocrileno en productos cosméticos y gran parte de esta sustancia, tras su uso diario, acaba en sistemas de depuración o directamente en mares, ríos y lagos, poniendo en riesgo la vida acuática. El hecho de que esté presente en los protectores solares es un gran problema, ya que incluso un simple baño en el mar ayuda a liberar la sustancia en el agua.
Además de los efectos ambientales, el octocrileno también tiene algunos posibles riesgos para la salud. Un estudio franco-estadounidense publicado en Investigación Química en Toxicología ha demostrado que, con el tiempo, el octocrileno contenido en los protectores solares puede degradarse para formar benzofenona, una sustancia clasificada como cancerígeno humano sospechoso (Grupo 2B) por la IARC y disruptor endocrino.
La investigación analizó 17 productos de protección solar habituales (marcas como Garnier, Bioderma, Roche Posay, L’Oréal) sometiéndolos a pruebas de estabilidad acelerada. Los resultados mostraron que casi todas las muestras contenían benzofenona, y las concentraciones aumentaban a medida que el producto envejecía, a veces duplicándose o triplicándose. Por tanto, el estudio refuerza la idea de que los cosméticos que contienen octocrileno pueden presentar riesgos a largo plazo.
Para limitar el uso de esta sustanciaANSES ha presentado una propuesta formal a la ECHA.
La propuesta de Anses
EL’Agencia Nacional Francesa de Seguridad Sanitaria (Anses) ha pedido a la ECHA (Agencia Europea de Sustancias Químicas) que reduzca la concentración máxima de octocrileno en los cosméticos a 0,001% p/v.
En este umbral, la sustancia prácticamente perdería toda eficacia como filtro y estabilizador UV, imposibilitando efectivamente su uso en productos cosméticos. Las empresas deberían reformular los productos, especialmente los solares, con un impacto económico considerado moderado y sostenible.
Una reducción drástica que promete importantes beneficios para los ecosistemas marinos y las aguas dulces y estudios sobre miles de consumidores en Europa muestran que las familias estarían dispuestas a pagar más por cosméticos sin esta sustancia, poniendo de relieve una cierta sensibilidad hacia la protección del medio ambiente.
La propuesta de la ANSES se encuentra actualmente en consulta pública en el sitio web de la ECHA hasta el 24 de marzo de 2026. Ciudadanos, científicos, asociaciones y empresas pueden enviar observaciones y datos científicos para contribuir al proceso. Posteriormente, los comités europeos encargados de evaluar los riesgos y el impacto socioeconómico analizarán los comentarios y emitirán un dictamen antes de septiembre de 2026.
En base a estos dictámenes, la Comisión Europea podrá aprobar la restricción definitiva. Si se adopta la medida, supondrá un paso significativo en la lucha contra la contaminación química procedente de los cosméticos, siguiendo el camino ya recorrido por las restricciones a otras sustancias nocivas para el medio marino.
Veremos si la UE considerará seriamente la propuesta francesa. Mientras tanto, como consumidores todavía podemos orientarnos hacia la elección de productos sin octocrileno.
Busque octocrileno en la etiqueta.
Para saber si un cosmético contiene octocrileno, el primer paso es Verifique cuidadosamente el INCI (la lista de ingredientes) en el paquete..
Siempre que es posible, elegimos productos formulados con filtros minerales como el óxido de zinc o el dióxido de titanio, que protegen la piel sin acumularse en el ecosistema y sin degradarse en sustancias potencialmente peligrosas como la benzofenona.