La población de Jaguar de México está subiendo, pero el gato más grande del país aún no está fuera del bosque.
Un censo de cuatro meses realizado el año pasado Por la Alianza Nacional para la Conservación de Jaguar (ANCJ) ha concluido que hay 5.326 jaguares salvajes en todo el país, un salto del 33% desde 2010, cuando la especie fue etiquetada en peligro de extinción (como todavía está).
Además, la cifra de 2024 es un salto del 11% desde el último censo de este tipo se completó en 2018.
Resultados del tercer censo nacional de Jaguar inicialmente se suponía que se lanzarían hace un año, y luego se retrasaron hasta febrero de 2025 antes de ser liberado la semana pasada.
Esos retrasos no son del todo sorprendentes, teniendo en cuenta el primer censo en 2008, que estudiar poblaciones de Jaguar en 15 sitios de conservación, tardó tres años en completarse. El trabajo realizado en ese estudio estableció México como líder en estrategias de conservación para preservar las poblaciones de Jaguar Wild.
Según ese primer censo, se estima que 4,000 jaguars vivían en el país, principalmente en la península de Yucatán. El segundo censo de 2018 encontró que la cifra había aumentado a aproximadamente 4,800.
Aunque el recuento de Jaguar más nuevo es de aproximadamente 525 más, los defensores advierten a la especie está lejos de ser seguro.
Para escapar del riesgo de extinción, México necesita al menos 8,000 jaguars, un objetivo, los científicos, según los científicos, pueden llevar más de 30 años al ritmo actual.
Actualmente, la península de Yucatán lidera a la nación con un estimado de 1,699 jaguars. La región del Sur del Pacífico tiene 1,541, seguido por el noreste/centro de México con 813, Pacífico Norte con 733 y Pacific Central con 540.
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El estudio se realizó en 23 sitios de hábitat de Jaguar en 16 estados: Sonora, Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Michoacán, Guerrero, Chiapas, Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Morelos, Hidalgo, San Luis Potosí, Nuevo Leó y Tamaulipas.
Los investigadores utilizaron 920 cámaras detectadas por el movimiento durante 414,000 hectáreas, que registraron 134 especímenes: 67 hembras, 47 hombres, 12 descendientes no identificados y ocho. Esos números formaron la base para la estimación total de la población.
Gerardo Ceballos, presidente de el ANCJ, una ONG, Llamados a los números «sorprendentes y alentadores».
Hizo hincapié en que las amenazas que limitan la recuperación permanecen, citando la pérdida de hábitat, la caza ilegal, el tráfico de animales, las enfermedades transmitidas por el ganado y los conflictos con las personas.
Acreditó los crecientes números en parte a las áreas protegidas en expansión de México, que permiten a los esquivos depredadores más espacio deambular y reproducirse. Sin embargo, agregó, el 70% de los sitios donde los jaguares viven en México están fuera de las áreas naturales protegidas.
Los grupos de conservación instan a las autoridades federales y a las compañías de redes sociales a hacer más para detener el comercio ilegal en las partes de Jaguar.
«Queremos que todos sean conscientes de que … la protección de Jaguar es una responsabilidad compartida», dijo Humberto Pena, coordinador de estrategia estatal de ANCJ.
Ceballos dijo que las reservas con el mayor número de jaguares son Calakmul, Gran Calakmul, Balam Kú y Balam Kin (Península de Yucatán); Montes azules (Chiapas); Sierra del Abra Tanchipa (San Luis Potosí); Chamela-Cuixmala (Jalisco); y Sierra de Vallejo-Río Ameca (Nayarit).
Algunos estados, como Hidalgo, apenas registraron una presencia para los grandes gatos; Solo se registró un avistamiento en el estado central mexicano.