Atters de barrido anti-crímenes sobre 300 barberos en el estado de México

Cientos de barberos y trabajadores del salón de belleza del estado de México salieron a las calles de la Ciudad de México el lunes para protestar contra lo que llaman abusos cometidos durante la Operación Atarraya, una redada anti-criminal a gran escala realizada el viernes.

Los manifestantes, que marcharon desde el Monumento a la revolución hacia Palacio Nacional, están exigiendo justicia y la reapertura de más de 300 barberes y salones de belleza cerrados por las autoridades.

Los manifestantes alegan que los agentes de la Oficina del Fiscal de México (FGJEM) plantaron drogas en sus establecimientos para justificar los cierres.

Ejecutado el 7 de febrero, Operación Atarraya ( Significa una red de fundición) tenía como objetivo desmantelar redes criminales que supuestamente usaban barbería y salones de belleza como frentes para el narcotráfico, la extorsión y otras actividades ilícitas.

Según el FGJEM, más de 2.200 agentes de seguridad federales y estatales allanaron 404 establecimientos en 20 municipios, cerrando 312 de ellos. Los municipios incluyeron EcatePec (población 1.6 millones), Nezahualcóyotl (1.1 millones) y Naucalpan (834,000).

Los funcionarios afirman que la operación se basó en inteligencia, quejas ciudadanas e investigaciones de campo, con 84 órdenes de allanamiento aprobadas por la corte ejecutadas.

Sin embargo, La controversia estalló cuando surgieron videos En las redes sociales parecen mostrar a los agentes que plantan sustancias ilícitas en algunas de las empresas específicas.

Estas acusaciones alimentaron la indignación pública, liderando a los barberos en EcatePec para bloquear la autopista Morelos en protesta el lunes. Mientras que ese bloqueo se levantó a media mañana, la congestión del tráfico persistió durante horas.

Las autoridades sostienen que muchas de las empresas cerradas estaban vinculadas a delincuencia organizada.

Citando un flujo constante de quejas de residentes y organizaciones comunitarias, las autoridades dijeron que tienen pruebas que indican que un porcentaje significativo de barberes en áreas de alto crimen se utilizó para actividades ilegales, incluida la extorsión y la venta de drogas y alcohol, incluso a menores.

Los informes, dijeron las autoridades, sugieren que algunos establecimientos sirvieron como puntos de reunión para células criminales y estaban conectados a incidentes violentos, incluidos los homicidios.

En respuesta a las crecientes acusaciones, FGJEM anunció una investigación interna sobre la posible mala conducta por parte de sus agentes. Las autoridades han reconocido la existencia de al menos tres casos en los que se detectaron irregularidades e instaron a los ciudadanos a informar cualquier abuso a (800) 702-8770 o (correos electrónicos protegidos).

La operación Atarraya se remonta a diciembre, Cuando se cerraron 186 bares y juntas de cerveza en 27 municipios estatales de México por autoridades federales y estatales.

La operación tiene como objetivo intervenir en los establecimientos utilizados por grupos penales para la promoción, consumo o tráfico de sustancias ilícitas, así como para actividades relacionadas con la comisión de otros actos penales.