El autoconsumo despega en Francia: 2024 duplica el número de operaciones del año anterior
La escena energética francesa está experimentando una revolución verde real: el consumo de energía colectiva se duplica en comparación con 2023, alcanzando casi 700 operaciones activas e involucrando a unos 8,500 participantes en todo el país. Este crecimiento exponencial subraya la creciente atracción de los proyectos de consumo de autoconsumo colectivo, donde las comunidades locales producen y consumen electricidad renovable. No es sorprendente que este modelo esté ganando tierra incluso en las regiones menos soleadas de Francia.
Los números del auge de Autoconsumo
Según los últimos datos publicados por el operador de la red francesa Enedis relacionada con el cuarto trimestre de 2024, Francia registró un total de 698 operaciones activas de consumo de autoevaluación, con una capacidad combinada de casi 74 MW. En comparación con el tercer trimestre de 2024, se agregaron casi 140 nuevas operaciones, un aumento significativo que llevó al número total al doble en comparación con 2023, cuando las operaciones activas fueron solo 332.
Con un promedio de dos productores y diez consumidores por operación, el consumo de autoconsumo colectivo se está convirtiendo en un pilar de la transición energética. Enedis ha encuestado precisamente 8.342 participantes totales, un signo de creciente conciencia y participación de los ciudadanos en el modelo de energía sostenible.
Los protagonistas de las regiones de la transición energética
A nivel regional, los datos no dejan dudas sobre las áreas más dinámicas. En la cabeza encontramos Occitania, con 94 operaciones, seguidas por la región Alvernia-Rodano-Alpi con 93, históricamente una de las regiones más activas en fotovoltaicos. La tercera posición de las sorpresas de Grand EST, que con 81 operaciones se destaca para un tejido industrial sólido y una densa red de iniciativas locales.
Perspectivas futuras y desafíos administrativos
El dinamismo del sector es alentador y es un buen augurio para el futuro. Según Enerplan, la Asociación Profesional de Energía Solar en Francia, la dinámica continúa y debe ser alentada. En este punto, reitera su preocupación, como muchos otros actores en el sector, con respecto a la introducción de una «licencia». Esta nueva necesidad administrativa corre el riesgo de complicar el consumo de autoconsumo colectivo, que en su lugar debería ser simple y accesible, y obstaculizar el desarrollo de redes de electricidad locales, virtuosas para las finanzas públicas y la transición de energía.
Por lo tanto, Francia se enfrenta a una oportunidad única para acelerar la transición de energía, siempre que los procedimientos se simplifiquen y fomenten aún más la participación de las comunidades.