El verano 2025 no será recordado solo por temperaturas récord, sino también por las vidas que el calor extremo ha quitado.
Un nuevo estudio realizado por el Imperial College London y la London School of Hygiene & Tropical Medicine estima que en las más de 800 ciudades europeas analizadas han muerto 24,400 Más personas que años anteriores debido a las olas de calor. Una cifra aún más inquietante es que más de dos tercios de estas muertes (68%, igual a 16,500 muertes) no habrían ocurrido sin el calentamiento global causado por el hombre, alimentado en gran parte por el uso de combustibles fósiles.
Italia a la vanguardia con las ciudades más afectadas en Europa
Entre las ciudades que pagan el precio más alto, hay precisamente las italianas. Milán Y Roma Estas son las dos primeras ciudades para muertes prematuras debido al cambio climático, con un aumento en las muertes de 1.156 y 835 respectivamente.
Y entre las diez principales ciudades europeas con el mayor número de muertes que también incluyen Nápoles Y Turina.
Greenpeace Italia recuerda que el Nuestro país es uno de los principales puntos climáticos de Europaen un continente que se calienta más rápido que el promedio global. Por lo tanto, no es sorprendente que las ciudades italianas se encuentren cada vez más vulnerables a los efectos de las ondas de calor, que no son solo una incomodidad de verano, sino una verdadera emergencia de salud pública.
La situación en Italia
El estudio analizado 87 ciudades italianas. En general, la temperatura promedio en Italia de junio a agosto de 2025 fue de 22.87 ° Ccon una anomalía de 1.31 ° C por encima del promedio del período 1990-2020.
Para Italia, el aumento en la temperatura de verano atribuible al cambio climático se estimó en promedio A 2.4 ° Ccon una variación entre las diferentes ciudades de 1.4 ° C a 3.5 ° C.
Entre las 30 capitales europeas examinadas, Roma registró la tasa de mortalidad estandarizada más alta por edadcon una estimación de 532 muertes por millón de habitantesun datos similares a los de Atenas y Bucarest. Aunque esta cifra se refiere al impacto en la salud y no directamente en la temperatura, el estudio sugiere que probablemente se refiere «la intensidad del calor experimentado por cada ciudad este verano«.
Aquí encontrarás el estudio completo.
No solo hace calor: es una crisis climática
La crisis climática continúa cosechando a las víctimas y se confirma como una de las mayores emergencias de nuestro tiempo, comenta Federico Spadini, de la campana climática de Greenpeace Italia.
Según la organización, para impulsar esta situación dramática son opciones políticas y económicas precisas: continúe extrayendo y quemando gas y petróleo, proporcionando subsidios al sector fósil y garantizar incentivos para grandes empresas contaminantes.
La consecuencia es que la crisis climática ya no es un problema abstracto, sino una amenaza directa para la salud, la seguridad y el futuro de las personas.
Greenpeace pide a los gobiernos no solo que promuevan las medidas preventivas y de adaptación a los efectos de las ondas de calor, sino que sobre todo actuar en la raíz, abandonando los combustibles fósiles y haciendo que las compañías petroleras y el gas sean el daño que están causando sus emisiones.
Italia y Europa corren el riesgo de no estar completamente preparados para la COP30 en Brasil. Es hora de que los líderes demuestren coraje y realmente se comprometan a despedirse de los combustibles fósiles, todavía denuncia espadas.
Por esta razón, Greenpeace ha lanzado una petición que le pide al gobierno italiano y a los gobiernos europeos que bloqueen nuevos proyectos fósiles, reduzcan los subsidios y los recursos gratuitos para asignarse a una transición de energía real a fuentes renovables.
Solo de esta manera será posible responder a lo que ya no es un desafío para el futuro, sino una urgencia del presente: proteger la vida de las personas de los efectos del calentamiento global.
Fuentes: Imperial College London y la London School of Hygiene & Tropical Medicine / Greenpeace