El Planeta sigue calentándose y septiembre de 2025 lo confirma: según datos de Servicio de Cambio Climático de Copérnico (C3S), el mes que acaba de terminar Fue el tercer septiembre más cálido registrado a nivel mundial.. El aire de la superficie alcanzó una temperatura promedio de 16.11 °C, 0,66 °C por encima del promedio del período 1991-2020 y 1,47 °C por encima de los niveles preindustriales.
El resultado proviene del servicio europeo gestionado porECMWF (Centro Europeo de Predicciones Meteorológicas a Medio Plazo) en el marco del programa Copernicus, financiado por la Unión Europea. Los datos se basan en un nuevo análisis. Era5que procesa miles de millones de mediciones desde satélites, barcos, aviones y estaciones meteorológicas de todo el mundo.

«Las temperaturas de la tierra y el mar siguen siendo persistentemente altas, lo que refleja la influencia continua de los gases de efecto invernadero en la atmósfera», afirmó. Samantha Burgessdirector estratégico de clima del ECMWF.
Un planeta que no se enfría
Aunque ligeramente inferior a los registros de 2023 y 2024, septiembre de 2025 confirma una tendencia nada tranquilizadora: la temperatura global media de los últimos doce meses (octubre de 2024 – septiembre de 2025) estaba 1,51 °C por encima del nivel preindustrial. Un valor que supera el umbral de 1,5 °C que señala el Acuerdo de París como límite a no superar para evitar consecuencias climáticas irreversibles.
Europa hirviendo (y bajo el agua)
En Europa, la temperatura media en septiembre fue de 15,95°C, 1,23°C por encima de lo normal, lo que la sitúa en el quinto lugar del ranking más caluroso de la historia. Las mayores anomalías se registraron en Fennoscandia (una región del norte de Europa) y Europa Orientalmientras que en algunas zonas de Europa occidental se observó un ligero enfriamiento.
En cuanto a las precipitaciones, el mes estuvo marcado por fuertes lluvias e inundaciones en varios países europeos, entre ellos Italia, Croacia y este de Españamientras que grandes zonas de la Península Ibérica y los Balcanes experimentaron condiciones más secas de lo normal.
Mares cada vez más cálidos
La temperatura media mundial de la superficie del mar alcanzó los 20,72°C, tercer valor más alto jamás registrado en septiembre. En el Mediterráneo, las aguas eran mucho más cálidas que la media, especialmente en las zonas occidental y central. La anomalía marina no es sólo un dato estadístico: afecta directamente al clima y a la frecuencia de eventos extremos, favoreciendo olas de calor, huracanes y precipitaciones violentas.
El hielo marino continúa retrocediendo
Los registros satelitales muestran que el Ártico registró su decimocuarta extensión mínima anual de hielo, una disminución del 12% con respecto al promedio. La Antártida también continúa perdiendo hielo, con una extensión mensual de hielo un 5% menor de lo normal. Datos que señalan un doble colapso de los polos, cada vez más vulnerables al calentamiento global.
Lo que nos dicen los números
Las anomalías térmicas e hidrológicas de septiembre confirman que el sistema climático de la Tierra se encuentra en una fase de sobrecalentamiento persistente, agravado por la concentración récord de gases de efecto invernadero. A nivel regional se alternan sequías e inundaciones, señales claras de un equilibrio comprometido.
Detrás de estos datos hay una señal clara: el clima global parece haber superado un umbral crítico. Incluso sin la influencia de El Niñolas temperaturas siguen siendo muy altas, señal de que el calentamiento provocado por los gases de efecto invernadero actúa ahora por sí solo. Los océanos, que hasta ahora habían absorbido parte del exceso de calor, están devolviendo energía a la atmósfera. Es como si la Tierra hubiera dejado de «enfriarse» y su sistema climático buscara un nuevo equilibrio, más caliente y más inestable.