Tenochtitlán: el modelo de urbanización sustentable del Imperio Azteca, pionero de la higiene y la gestión ambiental

Tenochtitláncapital del imperio azteca, representó un ejemplo avanzado de urbanización y gestión ambiental, distinguiéndose claramente de las ciudades europeas. Mientras que en Europa los desechos se tiraban con frecuencia por las ventanas, lo que contribuía a malas condiciones higiénicas, los aztecas adoptaron prácticas sostenibles de gestión de residuos. Los residuos orgánicos llegaron recogido y transformado en abonoutilizado para fertilizar los cultivos, lo que demuestra una considerable conciencia ecológica.

La higiene personal era igualmente importante en la sociedad azteca. Los habitantes de Tenochtitlán se bañaron hasta dos veces al díautilizando hierbas aromáticas para mantenerte fresco y limpio. Esta práctica contrastaba con los hábitos europeos de la época, donde el baño era poco común y se creía que lavar demasiado podría causar enfermedades.

La ciudad era conocida como la “ciudad blanca” por el uso extensivo de cal que cubrían edificios, calles y templos, dándoles un brillo único. Cuando llegaron los conquistadores españoles, quedaron impresionados por el brillo de la ciudad, hasta tal punto que pensaron que se encontraban ante una ciudad de plata pura.

Las chinampas producirán hasta siete cosechas al año

Desde el punto de vista agrícola, los aztecas desarrollaron las chinampasislas artificiales construidas en los lagos circundantes. Estas estructuras permitieron el cultivo. hasta siete cosechas al añomaximizando la producción en espacios reducidos. Las chinampas se crearon delimitando rectángulos en el lago, llenándolos de capas de vegetación y barro y plantar sauces a lo largo de los bordes para estabilizar el suelo. Este sistema agrícola intensivo aseguró una producción de alimentos suficiente para sustentar a la población urbana.

El mercado de tlatelolcoubicada al norte de Tenochtitlán, fue una de las más grandes de Mesoamérica en el período posclásico. Él dio la bienvenida todos los días más de 60.000 personasuna cifra impresionante en comparación con cualquier ciudad europea de la época. El mercado estaba organizado en secciones específicas para diferentes tipos de bienesincluidos alimentos, telas, herramientas y, lamentablemente, esclavos. La variedad y abundancia de productos disponibles reflejaban una compleja red comercial que se extendía mucho más allá de las fronteras del imperio azteca.

En resumen, Tenochtitlán representó una civilización avanzada tanto desde el punto de vista urbanístico como social. Sus prácticas de gestión de residuos, atención a la higiene personal, innovaciones agrícolas y organización comercial fueron vanguardistas para su época, colocando a los aztecas entre los pioneros en varios campos que hoy consideramos fundamentales para una sociedad sostenible y próspera.