Aunque el sector empresarial mexicano sigue siendo optimista sobre las perspectivas para 2025, los desafíos políticos y económicos enturbian el panorama general, según una encuesta realizada por la consultora KPMG.
Según la encuesta, el 80% de los casi 700 ejecutivos cree que las ventas aumentarán este año, pero sólo el 59% espera realizar nuevas inversiones en 2025. Esta cifra es 11 puntos menos que el año pasado, cuando el 70% de los encuestados dijo que planeaba hacer nuevas inversiones en 2024, según el diario Milenio.
La encuesta, Perspectivas de los altos ejecutivos en México 2025, encontró que los ejecutivos desconfían de los eventos políticos disruptivos (particularmente los cambios de gobierno tanto en México como de Estados Unidos), así como de los posibles conflictos comerciales y geopolíticos.
Entre los desafíos: el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado con imponer aranceles a los productos mexicanos importados a Estados Unidos y al mismo tiempo ha sugerido que podría reducir los impuestos sobre la renta corporativa al 15%.
La primera propuesta podría impactar el crecimiento de la deslocalización de México, mientras que la segunda propuesta es parte de la estrategia declarada de Trump para hacer de Estados Unidos un lugar más atractivo para las inversiones manufactureras.
Aun así, los encuestados creen que México está bien posicionado para aprovechar el nearshoring.
“México tiene una variedad de factores positivos”, dijo Ricardo Delfín, asociado de KPMG, según el diario El Economista. «Existe un buen equilibrio entre costo y calidad, así como una fuerza laboral calificada… y los ejecutivos todavía creen que (la deslocalización) afectará positivamente sus operaciones».
Cuatro de cada cinco ejecutivos creen que las ventas de su empresa mejorarán en 2025 y el 89% cree que las empresas prosperarán durante los próximos tres años (2025-2027).
Sin embargo, según la encuesta, el 56% espera que la economía mexicana se estanque en 2025, mientras que el 24% pronostica una recesión.
El análisis de la encuesta de KPMG destacó las cadenas de suministro existentes y potenciales (particularmente en conexión con la proximidad de México a Estados Unidos) y los numerosos tratados de libre comercio del país como factores que influyen en las perspectivas de los ejecutivos.

En cuanto a las posibles nuevas inversiones en 2025, casi dos tercios de los encuestados (63%) hicieron hincapié en satisfacer las necesidades actuales de los clientes, mientras que el 34% calificó las oportunidades de nearshoring como una prioridad. Otros objetivos de inversión serían consideraciones ambientales y abordar las fluctuaciones de los tipos de cambio.
El Economista dijo que el estudio indica que las estrategias de nearshoring este año probablemente se centrarán en buscar alianzas en la cadena de valor, modificar productos y servicios, aumentar la capacidad instalada e invertir en nuevas áreas geográficas.
Delfín dijo que está claro que los ejecutivos abordarán la expansión operativa con cautela principalmente porque ya se ha producido una gran expansión.
Otros desafíos señalados en la encuesta incluyen preocupaciones de seguridad (45%), atracción y retención de talentos (37%), una desaceleración en el consumo interno (35%) y el tipo de cambio del peso (34%).